El espíritu de grupo es lo que da a muchas empresas una ventaja sobre sus competidores. George L. Clements.
Cuando la idea enciende el bombillo que llevamos dentro, queremos rápidamente materializarla y para ello volcamos toda la pasión y mucha fuerza, aun así hay que partir de un diagnóstico inicial, utilizar técnicas estadísticas, e identificar el problema; a partir de entonces, trazamos una o varias hipótesis lanzando la imagen al mercado.
En este blog no hemos hablado del comportamiento del consumidor y puede ser tema de una próxima entrada, destacando que, para llevar a cabo cualquier proyecto de negocio, es sumamente importante conocer cuáles son las características del área geográfica y del consumidor en cuestión, principalmente en las zonas donde lanzaremos los productos o servicios, de este estudio pueden partir oportunidades que consolidan el éxito.
Comenzamos ordenando ideas, siempre vamos a pensar en dinero, pronóstico para cinco años, presentación, el local o los locales, etc. y todo esto nos lleva a una mecánica de la escritura del plan.
Muchos nos preguntamos en esta fase y ¿Qué es un plan de negocios? ¿Cómo redactar un plan de negocios?
Dice Brian Finch, en su libro 30 minutos para redactar un plan de negocios de la editorial Granica, 1999, que un plan de negocios es una herramienta de comunicación, destinada a trasmitir información a una amplia gama de personas, inversores, socios potenciales, personal, empresarios, etc. Y que lo podemos utilizar como ayuda para elaborar las estrategias a seguir.
Por otro lado en la página web http://definicion.de/plan-de-negocios/ citan que un plan de negocios es una guía para el emprendedor o empresarios donde se analiza la situación del mercado y se toman una serie de acciones.
La Wikipedia en línea nos dice: Un plan de negocio es una declaración formal de un conjunto de objetivos de una idea o iniciativa empresarial, que se constituye como una fase de proyección y evaluación. Se emplea internamente por la administración para la planificación de las tareas, y evalúa la necesidad de recurrir a bancos o posibles inversores, para que aporten financiación al negocio.
Todos estamos de acuerdo que nuestras ideas no van a ningún sitio sin un plan de negocios, por eso es importante aprender cómo elaborarlo correctamente, para que sea lo más confiable posible y se ajuste realmente a nuestras necesidades, ya que en cualquiera de los conceptos vistos anteriormente se observa que el objetivo es lograr la repuesta deseada.
En cuanto a su redacción destacamos que debemos ser claros, no utilizar abreviaturas que nadie pueda entender, utilizando un lenguaje simple y planteándonos para que auditorio lo elaboramos.
La estructura del plan.
1.Empezar con una síntesis.
El primer objetivo sería captar la atención con un tema interesante que avale la propuesta elaborada.
Importante no escribir la síntesis sin antes haber terminado todo el plan de negocios.
- Antecedentes.
La idea se crea, pero el escenario también hay que crearlo, aportando elementos nuevos del mercado.
- ¿Qué hacemos?
- ¿Dónde lo hacemos?
- ¿Cómo lo hacemos?
- ¿Cómo vendemos el producto?
- ¿Dónde lo vendemos?
- ¿Qué proveedores y clientes tenemos?
- ¿Qué tamaño tendrá?, (nos referimos a productividad, ganancias, personal, etc.)
- Esquema y organización que tendrá el negocio.
Ser selectivo porque cada negocio es distinto, definiendo si nuestro producto es diferente, en el plan lo debemos aclarar, hablando de los puntos fuertes y débiles de los competidores para mostrar que conocemos muy bien el área donde vamos a emprender.
Tener en cuenta a los proveedores, si son una fuente única de materia prima o subcontratada, referente a los procesos hay que tener bien definido, si usamos maquinarias y que característica tendrían en relación a la de la competencia, distribución: ¿Cómo entrego mi producto?, ¿Usaremos intermediarios?, o vendemos directamente al consumidor, como lo almacenamos, transportamos, etc.
- El mercado.
Describimos el ambiente en el que vamos a operar, teniendo en cuenta la segmentación, estructura, tamaño y tendencias de los productos que ofertamos.
- Competidores.
Conocer los competidores y el éxito que ostentan a través de la distribución, precios, peso de la marca, empaquetamiento, promoción, recursos financieros, etc.
Explicando cuales son las fortalezas que tendrá el negocio para hacer competencia al resto de empresas con productos o servicios similares.
- El cliente.
Nunca debe faltar el cliente, hay que hablar de quien nos compra, sin ignorar al consumidor final, así inspiramos confianza.
- Síntesis de la trayectoria del negocio.
Principalmente si ya existe, tendremos en cuenta las expectativas futuras, los entes de caridad sin fines de lucro, procedimientos para evaluar el coste, planteando las premisas claves que se basa en todo pronóstico.
- La propuesta.
Dedicar tiempo a escribir y al final no pedir lo que necesitamos para iniciar la propuesta, es un error, por eso hay que explicar claro, cuáles serían las acciones iniciales, subrayando de forma general las ganancias sobre ventas, tomando en cuenta todos los gastos e intereses, dejando margen a la flexibilidad para poder dejar abierto en discusión cualquier tema.
¿Cuánto voy a invertir?
Existen muchas maneras de demostrar que queremos hacer algo, pero la más persuasiva es el dinero, si promovemos el negocio y nadie está dispuesto a invertir, ni siquiera uno mismo, crearía dudas.
En todos los factores hay que mostrar claridad y no menos importante reflejar los gastos por salarios, justificándolos si es necesario.
- Los Riesgos.
No se puede desconocer que el usuario final que lea nuestro plan, siempre preguntara y cuál es mi ganancia, a que riesgos me puedo enfrentar.
Siempre algo puede salir mal, pero si confeccionamos un plan de contingencia que resuelva cualquier situación que pueda surgir negativamente en el negocio, mostramos que los riesgos y amenazas pueden ser disminuidos, ejemplo: que las ventas no alcancen el volumen planificado o que se eleven los costes de venta, etc.
Por lo general si las ventas no van bien, hay muchas alternativas para lograr un equilibrio como es disminuir el personal, o sacrificar gastos fijos o disminuir gastos del área de marketing que a corto plazo es una solución, pero a largo plazo es un problema por la importancia que reviste la investigación y desarrollo de este departamento, intentar nunca tocar el precio.
Planes de negocios internos.
La planeación ayuda a definir las estrategias deseadas en cada acción, del mismo modo comunicar el plan generan nuevas idean que aportan al desarrollo del propio negocio y mejoran el proceso de toma de decisiones dirigiendo las energías y talentos en una misma dirección.
Ahora nos preguntamos: ¿En qué se diferencia un plan interno de uno externo?
Partimos que los objetivos principales de un plan interno son:
- Comunicación.
- Coordinación y Control
- Desempeño
Esto nos permite fijar objetivos, especificar acciones, identificar el entrenamiento, formación, compromiso, que todos los que lo implementan se sientan dueño, construir el equipo, dirigir el proceso, etc.
No olvidar que solo existe una oportunidad, es muy difícil cambiar una mala impresión.
Las oportunidades pequeñas son el principio de las grandes empresas. Demóstenes.
Dejen sus comentarios y sígueme, hasta luego.
Referencias bibliográficas.
https://es.wikipedia.org/wiki/Plan_de_negocio.
http://definicion.de/plan-de-negocios/
Finch Brian, 30 minutos para redactar un plan de negocios, Granica, 1999.
Colectivo de autores, Fundamentos del Marketing (ESEM), Pirámides, 2013
Acisclo del Valle Alvarez 